lunes, 9 de diciembre de 2013

Mil Visitas Mil

Durante el fin de semana pasado, el blog alcanzó la cifra de 1,000 visitas. Se han alcanzado tras 23 entradas y 9 meses de publicaciones. Hagamos un alto para analizar la actividad del blog y sacar alguna que otra conclusión.

Las visitas

Las 1,023 visitas se han distribuido, como era de esperar, de forma desigual entre las diferentes entradas, con un mínimo de 14 y un máximo de 47 . De hecho, 16 entradas han tenido menos de 30 visitas, mientras que 7 han tenido más de 30 visitas.

El 65% de las visitas han procedido de España. El otro 35% se ha repartido entre más de diez países, con Estados Unidos (21%) y Rusia y Alemania (10% entre los dos) como los principales orígenes del extranjero. Menores entradas se han registrado desde otros países europeos (Países Bajos, Reino Unido, Serbia, Ucrania, Israel) y desde Sudamérica (Venezuela, Perú, Ecuador, Bolivia).

Por otro lado, el 75% de las visitas se han realizado con sistemas operativos Windows (63%), Macintosh (7%) i Lynus (5%), más propios de sobremesas y portátiles, mientra que solo el 25% lo han hecho con SO más propios de móviles i tablets (Android 20% y resto 5%).

Las entradas

Para comenzar, confesar que no hemos sido capaces de publicar una entrada a la semana, que era nuestro objetivo. Marzo fue el mes más prolífico, con 12 entradas. Por lo demás, lo más común ha sido publicar una entrada por mes, llegando a 3 en algunos meses (o ninguna en alguno).

Por etiquetas, el tema más tratado estos nueve meses ha sido el de los Social Media (tratado en 14 entradas), Tendencias (en 9 entradas), Economía, Neurociencia y Política (6).

Por otro lado, hemos hablado poco de Periodismo, Moda, Marketing y Asia, con solo dos entradas por tema.

Y para terminar, el ranking de las 5 entradas que más interés han despertado:

¿Otra Amenaza para el Periodismo?, junio 2013. 47 visitas.
Cuidado con los MeGusta de Facebook! marzo 2013. 34 visitas.
¿Se Puede Medir la Globalización? octubre 2010. 32 visitas.

Conclusiones

El seguidor medio tiene interés en conocer cómo la evolución de las TIC está cambiando el entorno en el que se mueve. Le preocupan más los temas cercanos, como el periodismo, la educación, las redes sociales y los efectos del acceso a ellas, en particular, y a Internet en general. Pero además tiene mucha curiosidad sobre preocupaciones globales, como los cambios en el orden mundial, la economía y el arte. Además es reflexivo y de cierta edad, pues suele leer en mesa y con pantalla grande.

Nuestro interés se centra ahora en saber qué piensa el lector de este blog. Porque ninguna de las 1,023 visitas ha dejado comentario alguno. ¿Va siendo el momento?









viernes, 6 de diciembre de 2013

Neurosexismo: ¿Hay Sexismo en la Ciencia?

El pasado 6 de octubre, The Independent publicaba un artículo titulado "Las diferencias en la conectividad entre el cerebro del hombre y el de la mujer podrían explicar porqué los hombres son mejores leyendo mapas (y las mujeres lo son recordando conversaciones)". Cita un estudio de la Universidad de Wisconsin, titulado Diffusion Tenor Imaging of the Brain, que viene a decir que, utilizando las técnicas DTI, se ha podido saber que las conexiones neuronales del hombre son más intensas en el interior de cada hemisferio, mientras que las de la mujer los son entre los dos hemisferios. El estudio ha sido divulgado en la PNAS (Proceedings of the National Academic of Sciences, de Estados Unidos).

Un medio de comunicación serio informando sobre un estudio realizado por catedráticos de una universidad de prestigio y divulgado por una reconocida revista científica. Un triple A, una información que cumple con los estándars de este blog y que, probablemente, habríamos divulgado de haberla conocido en su tiempo.

Interesante, ¿no? Sí, pero cuidado.

Ayer mismo, Popular Science publicaba un artículo de Cordelia Fine, de la Universidad de Melbourne, en el que analizaba los procedimientos, resultados e interpretaciones de dicho estudio. La señora Fine reconocía la calidad de la DTI y los datos resultantes, pero no compartía la interpretación de los mismos. Muy someramente, venía a decir que dicho estudio carecía del análisis de otros factores que, además del género, pudieran explicar dicha diferencia, como el tamaño del cerebro, por ejemplo. Además, y vamos entrando en harina, declaraba que los científicos que investigan las diferencias entre sexos tienen una gran responsabilidad a la hora de publicar sus estudios, sobre todo por cómo los prejuicios sociales pueden afectar a sus investigaciones y cómo la comprensión que de las mismas tiene el público en general puede acabar reforzando dichas creencias. Terminaba destacando que la ciencia tiene una oportunidad de oro para justamente lo contrario: para cambiar dichos prejuicios a través de rigurosas interpretaciones y reflexivos debates. Me ha recordado a los científicos creacionistas, los que rechazan la Evolución y su enseñanza en la escuela.

Otro análisis de una prestigiosa científica publicado en una reconocida página web.

Ciudadano Manolo no está en condiciones de analizar dichos estudios y participar en los debates que provocan, pero sí es consciente de que es el destinatario final de una cantidad ingente de información, que suele usar para entender la realidad que le rodea, con lo que tiende a tragase aquello que confirma lo que ve ("Ah!, es por esto que ocurre aquello").

Lo que queremos destacar en esta entrada es que nos toca vivir en una sociedad que tiene a su alcance toda la información que la Humanidad genera y ha generado durante miles de años, pero que la calidad y la veracidad de la mayoría de esta información es dudosa, ya que o directamente es falsa o, siendo verdadera, pudiera ser malinterpretada o, en el peor y más común de los casos, presentarse de forma tendenciosa para influir en nuestro comportamiento.

La aplicación del método ciéntifico, el gran responsable de la evolución de nuestra sociedad durante los últimos 400 años, sigue siendo la única herramienta válida para conocer la realidad que nos rodea. A pasar de ello, hemos de ser conscientes que la Sociedad de la Información nos hará llegar, sin duda, multitud de estudios científicos en su diseño y desarrollo pero con importantes lagunas en la interpretación de los resultados, cuando no mala fe

Las únicas defensas que se me ocurren son la desconfianza y la reflexión. Y estar preparados: sobre algunos temas, vamos a estar muy confundidos durante mucho tiempo.

Popular Science. Artículo de Cordelia Fine
Atículo en The Independent
Estudio de la Universaidad de Wisconsin